El teatro de comienzos del siglo XX  se divide en dos grandes grupos: (a) el teatro comercial y (b) el teatro de renovación.

(a) Dentro de este primer grupo encontraremos una serie de obras que gozaron del aplauso del público, en su mayoría burgués, destinatario principal de este teatro. En ellas se busca, mediante un estilo poético y cómico, agradar a esta clase social acomodándose al buen gusto, incorporando, por ejemplo, música y baile para entretenerlo. Como máximo representante de este bloque habría que citar a Jacinto Benavente, Premio Nobel (1922), los hermanos Álvarez Quintero, Carlos Arniches y Pedro Muñoz Seca, entre otros.

(b) En el teatro de renovación incluiremos un grupo de autores que no se someten a estos gustos y que pretenden un cambio, aun a sabiendas de que no contarían, de antemano, con el gusto del público. En este grupo podríamos incluir a algunos autores de la Generación del 98, que, aunque destacaron en poesía o novela, también se animan a esta renovación teatral. Hablamos de Unamuno, con Fedra; de Azorín, con Lo invisible, y, sobre todo, de Valle-Inclán, con Luces de bohemia, que estudiaremos en profundidad.

Esta doble tendencia en el teatro español del primer tercio del siglo XX será el objeto de estudio de este recurso, destinado al alumnado de 4º ESO e incluido en el itinerario"La Literatura en el Modernismo y la Generación del 98".  En él, ofrece una serie de actividades lúdicas y de análisis de textos literarios mediante las que se pretende una mejor adquisición de los contenidos planteados en el mismo. Por último, se plantea una rúbrica como instrumento de evaluación por medio de la cual poder evaluar el grado de consecución de lo objetivos planteados en este recurso, en el que se recomienda emplear, al menos, dos sesiones.