Los recursos minerales de la Tierra proporcionan a los seres humanos los bienes necesarios para su vida y para el avance de la civilización humana. Sin embargo, son recursos no renovables que debemos cuidar para que no se produzca su agotamiento y garantizar su sostenibilidad.
Según datos de Eurostat, en 2020, cada ciudadano/a europeo consumió el equivalente a 13,5 toneladas per cápita de materias primas, de las cuales algo más de 0,7 toneladas correspondieron a metales y 7,1 a materias primas minerales no metálicas.
La OCDE prevé que, pese a una mayor eficiencia en el uso de los recursos, incluyendo la economía circular, el uso de materias primas minerales se duplicará en 2060 (+110%). En el caso de los metales, las previsiones apuntan a un incremento del +150%, pasando de 8.000 a 20.000 millones de toneladas en 2060.
En la situación de emergencia planetaria actual se necesita más que nunca una revisión en profundidad de todas las actividades relacionadas con la extracción de los recursos minerales disponibles en el planeta, para lograr su sostenibilidad social, medioambiental y económica.
(Fuente de estos datos: Hoja de ruta para la gestión sostenible de materias primas minerales. MITECO)
En esta tarea reflexionaremos sobre todo esto.