Los sistemas biológicos son sistemas muy complejos, tanto en su estructura, como en su funcionamiento. Los organismos (biocenosis) en un ecosistema interactúan tanto consigo mismos, como con los componentes abióticos. De esta forma, se establecen complicadas relaciones tróficas, de depredador-presa, elementos del medio que limitan, relaciones inter e intraespecíficas, etc. que tienen como consecuencia adaptaciones de los organismos a su medio. Pero, además, todo ello no es estático, sino muy cambiante. Un ecosistema evoluciona en el tiempo según sus relaciones y es importante que consideremos este factor en todos los estudios científicos.
En la siguiente tarea final, vamos a poner en juego lo aprendido analizando seis escenarios. Cada uno de ellos describe una interacción entre una población y un factor abiótico o biótico. Trataremos de buscar patrones de interacción en ellos.