A través de la siguiente actividad, el alumnado tendrá acceso a las definiciones e información relativa sobre cada una de las cinco comidas del día (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena). El contenido se presenta a través de pequeñas lecturas, en las que se muestran diferentes ejemplos para facilitar la comprensión. Posteriormente a la lectura de cada una de las diferentes comidas, se aconseja preguntar al alumnado cuántas comidas realizan ellos al día y de qué forma (copiosas o escasas). Con ello se intentará que el alumnado tome conciencia sobre cada una de las comidas y reflexione acerca de los hábitos alimenticios que cada uno de ellos posee.
EL DESAYUNO
El desayuno es la primera comida del día. Se realiza por la mañana entre las siete y las nueve de la mañana, después de pasar varias horas sin tomar ningún tipo de alimento, es decir, después de dormir. Por esta razón, se considera tan importante.
Para realizar un buen desayuno, se recomienda tomar diferentes tipos de alimentos, tanto líquidos como sólidos. Veamos un ejemplo:
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Alimentos líquidos: Un té, un vaso de leche, un zumo de frutas, una infusión...
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Alimentos sólidos: Unas tostadas, un sándwich, unas galletas...
¿Qué ocurre si no se desayuna correctamente?
Si no se realiza un buen desayuno, se puede apreciar falta de energía, malhumor o bajo rendimiento mental y físico. Por eso, es tan importante desayunar bien.
EL ALMUERZO
El almuerzo es la segunda comida del día. Se realiza aproximadamente entre las diez y media y las doce de la mañana, cuando ya han pasado unas horas después de desayunar. Esta comida suele ser más ligera que el desayuno. Los almuerzos pueden ser muy variados, veamos algunos ejemplos:
- Pieza de fruta.
- Yogurt.
- Sándwich.
- Frutos secos.
¿Qué ocurre si no realizamos el almuerzo?
El no tomar el almuerzo, puede provocar que se tenga demasiada hambre hasta la hora de comer. Si esto sucede, probablemente en la siguiente comida se tomarán más alimentos de los que nuestro organismo necesita, es decir, se comerá en exceso.
LA COMIDA
La comida es la tercera comida del día. Se realiza entre las dos y las tres y media de la tarde. Se considera la comida más abundante del día y debe ser rica y variada en alimentos. Es un buen momento para ingerir hidratos de carbono (pasta, pan...), proteínas (carnes, pescado, huevos...), vitaminas (verduras y frutas) y grasas saludables (aceite de oliva).
Las comidas pueden ser muy variadas. A continuación, se muestran algunos ejemplos:
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Ejemplo 1. Pechuga de pollo a la plancha, pan, ensalada y una pieza de fruta.
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Ejemplo 2. Puchero de legumbres con verduras, filetes rusos con ensalada y un yogurt.
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Ejemplo 3. Gazpacho, arroz con huevo frito y tomate y una pieza de fruta.
LA MERIENDA
La merienda es la cuarta comida del día. Se realiza por la tarde, entre la comida y la cena. Debe ser ligera al igual que el almuerzo de media mañana, por lo tanto, los tipos de alimentos que consumiremos serán parecidos. Mira los siguientes ejemplos de meriendas.
- Fruta.
- Bocadillo de pavo.
- Yogurt con frutas.
- Sándwich de atún y tomate.
¿Qué ocurre si no se merienda?
Si no se merienda, pasará lo mismo que ocurría con el almuerzo, se llegará a la siguiente comida (la cena) con más hambre y se ingerirán alimentos en exceso.
LA CENA
La cena es la quinta comida del día, la última. Se recomienda cenar entre las ocho y las nueve y media de la noche. Debe ser una comida ligera, ya que llega el final del día y no se consume mucha energía. Además, si se realiza una cena abundante puede dificultar el descanso y favorecer la aparición de diferentes trastornos o enfermedades relacionados con la alimentación, como puede ser la obesidad.
Algunos ejemplos de cena serían los siguientes:
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Ejemplo 1. Tortilla francesa con ensalada y una pieza de fruta.
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Ejemplo 2. Merluza al horno con patatas, una pieza de fruta y yogurt.
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Ejemplo 3. Sopa de verdura, pescado a la plancha y una pieza de fruta.
