Material:

• Hojas de papel DIN A3 o cartulinas grandes.
• Tijeras y pegamento de barra.
• Revistas, periódicos, fotocopias de grabados antiguos, papeles de diferentes tipos...
• Ceras de colores, lápices de colores o témperas y pinceles.
• Impresora (para imprimir alguna imagen que lleven).

Propuesta: después de todo lo trabajado en la sesión anterior, vamos a comenzar por pedir que respondan a la pregunta: ¿Cómo te imaginas tu laberinto particular?, para después plantearles la construcción, de forma individual, de un contralaberinto.

Nos parece interesante la recreación por medio de las artes de las experiencias del mundo personal de los jóvenes y el hacer conscientes y sensibles sus vivencias, sin dejar de lado la integración de sus cuerpos como una forma de aumentar su confianza experimentando con técnicas y materiales plásticos.

Proponemos hacer un mapa de todos los buenos momentos que vivimos. En él pueden aparecer imágenes, dibujos, recortes de lugares, rincones, paisajes, etc. donde nos hemos encontrado a gusto, que han marcado de alguna manera nuestra vida, en los que hemos tenido buenas vivencias, algo así como lo contrario a un laberinto. Por eso le damos el nombre de contralaberinto. Podemos incluir fotografías que hagamos a nuestro entorno cercano, objetos personales, animales, plantas, personas, etc. También es posible incluir una canción, o añadir texto o palabras.