Antes de empezar, vamos a colocar los lápices en el centro de la mesa y consensuamos la respuesta de nuestro equipo a la siguiente pregunta:
¿Qué descubrimientos se realizaron en la Edad Media?
Una vez que hemos aclarado las dudas, cogemos el folio (podemos descargar este pdf) y anotamos nuestra respuesta. A continuación, realizamos una puesta en común con los demás compañeros y compañeras de la clase.
Descubrimientos medievales que cambiaron el mundo
Instrumentos para la navegación
En la Edad Media se realizaron grandes avances en la navegación.
Entre los instrumentos de navegación más destacados que se inventaron en aquella época y que marcaron cambios importantes se encuentran:
el timón de codaste, que hacían los barcos más navegables,
la vela latina, que permitía navegar a contraviento,
la brújula magnética, que servía para orientarse con mayor precisión,
la quilla, que servía de contrapeso a la acción del viento y hacía los barcos más estables.
Estos avances en la navegación favorecieron el comercio entre lugares muy alejados y se exploraron otros mundos, puesto que la navegación en alta mar era más fiable y segura con la ayuda de estos instrumentos.
El cuadrante y el astrolabio
Aunque el cuadrante y el astrolabio eran conocidos desde antes, en la Edad Media los astrónomos árabes perfeccionaron y mejoraron estos instrumentos.
Ahora podían medir la distancia entre dos objetos, convirtiéndose en instrumentos muy útiles en topografía, astronomía y navegación. Aunque más tarde fueron reemplazados por otros inventos, siguen siendo importantes para la ciencia y la tecnología.
El reloj mecánico
Antiguamente, el tiempo se medía con una variedad de instrumentos como relojes de arena, de agua y solares, cuyas medidas resultaban difíciles de equiparar. En la Edad Media, aproximadamente en el año 1300, se inventó el reloj mecánico que permitió unificar la medición del tiempo.
Este descubrimiento cambió la manera de cuantificar el trabajo y pagar acorde a las horas trabajadas. Al principio, eran poco precisos debido a la fricción de los materiales, pero con el tiempo se mejoraron bastante hasta que apenas se atrasaban un minuto al día.
Las vidrieras y los arbotantes
Con la aparición del estilo arquitectónico gótico en el siglo XII, se descubrieron los arbotantes, unas innovaciones arquitectónicas que permitían a las iglesias tener unos techos mucho más altos, muros más ligeros y ventanas más grandes.
Con el tiempo, las ventanas fueron cubiertas de cristales en vez de materiales opacos, como tapices o telas, lo que permitía la entrada de luz natural y mantener la temperatura en el interior de las casas. Con el estilo gótico, estas ventanas conocidas como vidrieras, se pintaban de colores.
Las gafas
Parece ser que por el siglo XIII, con la expansión de la industria de cristal, un monje tuvo la brillante idea de unir un par de lentes convexas a una montura de sujeción, creando así las primeras gafas de la historia. Estos instrumentos de óptica permitían corregir los problemas de visión, tratándose de uno de los más útiles inventos medievales.
Más tarde, durante el Renacimiento, con el uso científico de las lentes se inventaron los primeros telescopios.
Los molinos de agua y de viento
Aunque los molinos fueron utilizados desde los tiempos del Neolítico, fue en la Edad Media cuando se inventaron nuevas e ingeniosas formas de molinos que permitieron a la población utilizar la energía de elementos de la naturaleza como el viento o el agua de los ríos.
Las cafeterías y los útiles para la destilación
En la península arábiga, durante el siglo XV, surgió la costumbre de beber café, por lo que, las cafeterías se hicieron muy populares. Estos establecimientos cambiaron, no solo el modo cómo la gente comía y bebía, si no creando nuevas maneras de interacción social. Los árabes también fueron los primeros en el uso del cristal para la fabricación de utillaje de laboratorios como los útiles para la destilación.
La elaboración de serpentines, alambiques y otras piezas especializadas permitió el desarrollo de la química práctica y la obtención de perfumes, alcoholes y otros productos que podían usarse con fines científicos o en la vida cotidiana.
La imprenta
En 1440, el alemán Johannes Gutenberg perfeccionó un sistema de tipos móviles que ya existía desde el siglo VIII en Corea y China, e inventó una máquina capaz de hacer varias copias de un libro a la vez, la imprenta. El primer libro impreso fue la biblia.
Este invento permitió reducir el tiempo y el coste de la imprenta, lo que, sumado a la difusión del papel como soporte, puso los documentos escritos al alcance de muchas más personas, aunque todavía estaban reservados a la élite.
Las bibliotecas
A finales de la Edad Media, en 1452, se abrió la primera biblioteca pública del mundo abierta a todas las personas. La Biblioteca de Malatesta Novello está en un edificio que pertenecía a la comuna de la ciudad de Cesena, Italia. Allí se permitía a los lectores el acceso libre a la consulta de su colección de libros.