Paco y Lidia estaban hablando tranquilamente en la estación de autobús.
- ¡Ey! Ayer jugamos al fútbol en Madrid.
Lidia respondió:
- ¿Eh? ¿Has dicho algo? Perdona, que estaba con el móvil.
-¡Uf! Que ayer jugué al fútbol en Madrid.
- ¡Ah! ¿Y qué tal fue la cosa? ¿Ganasteis?
Paco se hizo el interesante para, al final, contestar lo siguiente:
- ¡Ganamos el partido 2-1 y yo fui el héroe del partido! Aunque fue sin querer ¡ja ja ja!
-¿Ein? No entiendo. ¿Por qué fuiste el héroe sin querer?
- Pues porque en un ataque del otro equipo el delantero sorteó a nuestro portero y tiró. Yo estaba defendiendo para que no entrara y ... ¡Catapún! Me caí y de chiripa despejé el balón con la cabeza salvando el gol.
- ¡Ja ja ja! ¡Bravo, Paco! Eres una estrella con suerte.
- No te metas conmigo, ¿eh?
Paco y Lidia acabaron esa divertida conversación justo antes de que llegara el autobús para ir al colegio.
Jorge Quintín Calle