Introducción
Debemos ser conscientes de que las personas tenemos necesidades ilimitadas, pero que los recursos no son infinitos, tienen un límite y debemos velar por no agotarlos. Todas las decisiones que tomemos como consumidores tendrán una repercusión económica, pero también en el medio ambiente.
¿Para ti consumir es sinónimo de felicidad? A lo mejor es el momento de pararte a pensar con una actitud crítica si realmente necesitas todo lo que compras y pasar a la acción con tu granito de arena. Hay otras propuestas posibles, como, por ejemplo, la economía circular, que deberías explorar y conocer para conseguir dejar a las generaciones venideras un planeta limpio y verde.