Miramos al cielo
La fábrica de nubes no para de trabajar ni por el día ni por la noche; el cielo suele tener siempre alguna nube. Las nubes forman parte del imaginario de los niños y de las niñas desde sus primeros años; ya sea a través de dibujos, de conversaciones, de cuentos o de juegos, siempre se habla de ella. Por tanto, son un elemento conocido, pero a la vez lleno de enigmas para las y los más pequeños, dando pie a multitud de preguntas y apreciaciones sobre ellas.
Por ello, el patio y los pasillos se denominan la «Zona 0» de La fábrica de nubes. El patio como espacio abierto es un gran aliado para que el alumnado se cuestione el origen de las nubes, imagine formas, se pregunte por qué van tan rápidas o por qué van tan lentas, por qué son blancas, grises e, incluso, por qué no son de colores, por qué no las podemos tocar o guardar en una caja...
Reto
¿Nos atrevemos a investigar sobre todos los enigmas que rondan a la «La fábrica de nubes»? Seguro que aprendemos muchísimas cosas sobre ellas. ¡Será muy divertido!
¿Por qué son especiales las nubes?
Vamos a fijarnos muy bien en ellas a lo largo del patio «Zona 0», siguiendo atentamente las normas e instrucciones indicadas y veamos qué se nos ocurre para contestar a estas preguntas y otras que nos puedan surgir.
Gran grupo
Reflexionamos
- ¿Habéis pensado alguna vez de dónde vienen las nubes?
- ¿Por qué tienen formas y colores tan variados?
- ¿Por qué no las podemos tocar o guardar en una caja?
- ¿Qué hace que viajen más rápido?