En esta situación de aprendizaje, se pretende estimular el análisis crítico de un hábito cotidiano a partir de los conocimientos que adquiere el alumnado en el proceso y aplicando las competencias que se irán desarrollando. Con este fin, se propone que la revisión de saberes básicos que se lleva a cabo en las primeras sesiones, relativos a los conceptos de disolución y concentración, se lleve a cabo en parejas, buscando información relativa a lo que se aprendió en cursos anteriores, siendo así una investigación informada. El visionado de los clips de vídeo se presta a la aplicación de la metodología Flipped Classroom. Una vez visionado este material, se establecerán grupos de diálogo para debatir los aspectos más controvertidos de dichos vídeos y establecer conclusiones, que se basarán en los conceptos que se desarrollan en la SA y en los materiales de referencia.

El trabajo práctico, ya sea virtual o en el laboratorio, se desarrollará en pequeños grupos (2-3 alumnos/as) de forma que todos puedan aprender las técnicas experimentales aplicadas e interpretar los resultados obtenidos. El laboratorio virtual se presenta como una estrategia de aprendizaje en la que el alumnado pueda adquirir, de forma simulada, habilidades que después podrá aplicar en el laboratorio real si las posibilidades del centro educativo lo permiten.