Los cereales
Nos aportan mucha energía y son ricos en hidratos de carbono. Existe una gran variedad de cereales como el arroz, el trigo, el centeno, la avena o el maíz. Son muy ricos en vitamina B, un nutriente que contribuye al buen funcionamiento de las neuronas y de los glóbulos en la sangre. Se considera un alimento muy completo pues además contiene minerales como el calcio, el hierro o el magnesio.
A la hora de elegir productos elaborados con cereales debemos optar por los integrales que son los que conservan el salvado y el germen, es decir, la cáscara y el interior del grano, o bien consumirlo en granos enteros como un buen plato de arroz integral, o añadir a la ensalada maíz o copos de avena a nuestro desayuno. Debemos evitar los productos procesados que se elaboran con cereales, pero también, con azúcares o harinas refinadas como las galletas y la bollería industrial o los cereales azucarados.
En el plato de Harvard los cereales ocupan algo más de una cuarta parte y nos indica que deben de ser integrales, puesto que está demostrado que previenen la aparición de la diabetes ya que aportan menos insulina y azúcar en la sangre, nos ayudan a mantenernos en nuestro peso evitando la obesidad y mejoran la digestión.