¿Cómo distribuimos los alimentos en nuestro "plato de Harvard"?
A la hora de diseñar nuestro plato de Harvard tendremos en cuenta la siguiente división del plato:
La mitad del plato lo ocupan las verduras y las frutas: las verduras abarcan algo más de una cuarta parte y el resto sería para la fruta. La otra mitad del plato se divide en dos cuartos: una cuarta parte se destina a cereales preferiblemente integrales para evitar las harinas refinadas; el otro cuarto restante lo ocupan las proteínas, que serán saludables, preferiblemente aceite de oliva (evitando grasas saturadas y mantequilla) y no olvidarán la ingesta de lácteos, al tratarse de un alimento muy importante para el crecimiento de los niños por su alto contenido en calcio.
La forma de cocinar los alimentos también es importante intentando evitar los fritos y alimentos ya procesados. Es mejor apostar por la "real food" que significa comida real como alimentos frescos y a ser posibles de temporada que serán cocinados por nosotros, eligiendo verduras y frutas de huertas cercanas (consumo local) y carne y pescado fresco, evitando los embutidos que son mezclados con otros alimentos, conservantes y estabilizantes en su elaboración.
También a la hora de elegir los cereales es mejor si nos decidimos por el arroz integral y los panes elaborados con granos enteros, o que conserven el salvado y el germen (la capa externa y el interior del cereal) como el pan de trigo sarraceno, de centeno o de espelta entre otras muchas variedades.