La economía en plena Edad Media
El siglo XIII fue una centuria de prosperidad y de resurgimiento de la vida urbana. Varios son los aspectos que debemos estudiar para entender este proceso:
1. El desarrollo agrícola
La ausencia de guerras que se vivió en este período más la introducción de novedades en la agricultura permitieron un aumento de productividad que generó excedentes. Las principales innovaciones fueron:
- Nuevos instrumentos para el campo: arados que aireaban mejor la tierra, mejoras en los atalajes de los animales para el tiro y uso de molinos de agua o viento.
- Nuevas técnicas de cultivo: la rotación trienal, que consistió en dividir la parcela en tres partes para cultivar cereales en invierno y primavera, dejando otra zona en barbecho para el descanso de la tierra. Cada año se rotaban las tierras y se trabajaban de esta forma renovadas. Además, el uso de estiércol ayudó al aumento de la producción.
2. Aumento demográfico
Las mejoras agrícolas y la disminución de la mortalidad por la ausencia de guerras permitió permitieron que la población aumentase, pues mejoró la alimentación. Además, se buscaron nuevas tierras que cultivar o los campesinos se fueron a la ciudad huyendo de la presión de los señores feudales, generando un movimiento migratorio que benefició a las ciudades.
3. El renacer de las ciudades
El crecimiento de las urbes en el siglo XIII vino motivado, aparte de por el aumento de población, por varias razones:
a) Una ampliación de mercados generada por los excedentes del campo que llegaban a las ciudades:
- Se crearon ferias o mercados extraordinarios en ciertos momentos del año que dieron prosperidad a ciertas zonas. Destacan las de Provin o Troyes (Francia), Winchester o Northampton (Inglaterra) o Media del Campo (Castilla).
- Las rutas comerciales por el Mediterráneo y el Atlántico y mar del Norte consiguieron multiplicar los intercambios y fueron el inicio del crecimiento de ciudades como Génova, Florencia o Brujas, muy pujantes a lo largo de otros períodos históricos.
b) Los reyes controlaban la emisión y el diseño de las monedas pues se hizo imprescindible la circulación de dinero con el aumento del comercio. Además, facilitaron la aparición de otros mecanismos de pago como las letras de cambio para el transporte del capital. Podían cambiar ese documento por el dinero que estuviera acordado al llegar a la ciudad.
c) El auge de la producción artesanal que se vivió en las ciudades favoreció la organización en gremios por oficios. De esta forma, se protegían de la competencia de otras urbes y supervisaban la producción para mantener una serie de condiciones. El sistema para entrar era muy estricto, debiendo comenzar de aprendiz que, tras años de experiencia, podía pasar a oficial y terminar siendo maestro que, después de un examen, podía abrir su propio taller.