«El año sin verano» permite el uso y la aplicación de una metodología ecléctica, centrada principalmente en tres métodos de aprendizaje: el pensamiento de diseño (Design Thinking) y aprendizaje basado en el pensamiento, el aprendizaje cooperativo, y el aprendizaje basado en la investigación. 

El fin del pensamiento de diseño no es solo planificar acciones o tareas que permitan ejercitar la conceptualización de los aprendizajes, sino también desarrollar la metacognición del alumnado, con el propósito de que una vez éste aplique sus conocimientos y destrezas, sea capaz de reflexionar y transferir dichos conocimientos y y habilidades a otros contextos y situaciones cercanas a su realidad. Es por ello, que si bien muchas de las actividades  hacen uso de rutinas y destrezas del pensamiento, otras, se focalizan en el uso de las funciones cognitivas del discurso, con el fin de desarrollar el acto comunicativo de manera eficaz. 

Por otro lado, el aprendizaje cooperativo como método basado en el trabajo en equipo y la colaboración, permite la búsqueda de soluciones con el fin de responder a las pequeñas tareas planteadas, especialmente aquellas que implican un uso comunicativo de la lengua donde el intercambio de conocimientos y habilidades entre ellos y el apoyo mutuo son esenciales para alcanzar una implementación exitosa. 

Por último, «El año sin verano» facilita la capacidad del alumnado en investigar para desarrollar las diferentes tareas que se enmarcan en esta situación de aprendizaje. Constantemente, el alumnado debe desarrollar una habilidad investigadora, reflexiva que le ayude a navegar por la zona de desarrollo próximo con éxito, y poder de manera cada vez más autónoma, razonar y comunicar lo que ha aprendido.