Yacimientos arqueológicos, museos, bibliotecas y hemerotecas
Gran parte de las fuentes históricas materiales e iconográficas se encuentran en yacimientos y excavaciones arqueológicas. Una gran parte de los objetos encontrados son conservados en lugares especiales llamados museos. Los museos cumplen con una función muy importante, mostrar todo este patrimonio histórico al público general, para que pueda comprender su historia y sus tradiciones, así como la forma en la que se vivió en diferentes etapas históricas.
En muchos lugares históricos hay una zona en la que los visitantes pueden entrar para observar sobre el terreno los trabajos realizados así como el llamado centro de interpretación, lugar donde se explica la información más relevante sobre el lugar, los objetos encontrados y la función tanto de las diferentes zonas como de los objetos hallados allí.
Las bibliotecas son lugares donde se conservan libros y otras fuentes escritas además de realizar préstamos a los usuarios. Existen bibliotecas especiales, como la Biblioteca Nacional que se encuentra en Madrid, donde se guardan cuidadosamente libros y manuscritos muy antiguos que solo estudiosos de la historia e investigadores pueden consultar. El acceso está limitado para que estos libros no se estropeen debido a las condiciones especiales en las que tienen que ser conservados y manipulados.
Las hemerotecas también conservan fuentes escritas pues se archivan las publicaciones periódicas como revistas y periódicos de hace décadas. Esto facilita que podamos consultar los acontecimientos sucedidos hace muchos años. Actualmente podemos consultar tanto los fondos de las bibliotecas como las hemerotecas en Internet, también podemos realizar visitas virtuales a diferentes museos nacionales como internacionales, aunque la experiencia de visitar un museo es única, si podéis, no os la perdáis.