Relaciones de opuestos o en contraste
La relación que se establece entre dos palabras que presentan significados opuestos, se conoce con el nombre de antonimia. Por ejemplo, palabras como subir/bajar, alto/bajo, presentan una relación de oposición atendiendo al contexto en el que aparezcan. A estas palabras se las conoce con el nombre de palabras antónimas o antónimos.
La antonimia puede ser léxica, si se trata de palabras que proceden de distintas familias léxicas, es el caso de bondad/maldad, claro/oscuro; o puede ser gramatical, cuando procede de una palabra derivada y se forman con la adicción de un prefijo, es el caso de académico/antiacadémico, calificar/descalificar o predecible/ impredecible.
Dentro de la antonimia léxica diferenciamos tres tipos de oposiciones:
Antónimos complementarios
La afirmación de uno de ellos, implica la negación del contrario. Palabras como:
vivo/muerto
verdadero/falso
par/impar
Son términos que son mutuamente excluyentes: si algo es verdadero, entonces no es falso.
Antónimos contrarios
Entre el significado de una palabra y su contraria, puede existir una gradación. Por ejemplo:
frío/caliente
alto/bajo
Entre frío/caliente, por ejemplo, existen palabras como tibio, templado o fresco que reflejan esa gradación.
Antónimos inversos
Son palabras entre las que existe una correlación y se implican mutuamente. Palabras como:
padre/hijo
comprar / vender
Expresan una misma relación vista desde perspectivas opuestas. Para que alguien compre, necesita que alguien venda y al revés.