El ser depredadoras es una de las principales características de la sociedad del Paleolítico, basada en la caza de animales y en la recolección de frutos de la naturaleza.

Existen diferentes formas para obtener recursos de la caza y de la recolección:

• La caza mayor (bisontes, osos, ciervos) es realizada por hombres, es poco frecuente y se hace con armas de gran tamaño (lanzas).
• La caza menor (ranas, pájaros, lagartijas, insectos, ratones) es realizada por mujeres y se hace con trampas y armas de pequeño tamaño.
• El carroñeo, es decir, el aprovechamiento de los animales muertos, era muy habitual.
• La pesca empieza a practicarse hace 70.000 años en ríos y a la orilla del mar. Se hace con la mano, con trampas y con arpones.
• La recolección la realizan las mujeres desenterrando raíces y recolectando frutas y plantas acuáticas.

En este último apartado, conocemos cómo los primeros homínidos comienzan a elaborar instrumentos y a dominar el fuego.

Aparecen, primero, herramientas de piedra y, más tarde, de hueso y madera. La elaboración de herramientas y su posterior evolución es un signo que hace diferenciar la especie humana del resto de animales. 

Al principio, los primeros homínidos utilizan piedras talladas, también llamadas guijarros, con un filo cortante. Después, consiguen piedras muy afiladas elaboradas de minerales muy duros como es el sílex. A medida que pasa el tiempo, perfeccionan la talla de la piedra fabricando instrumentos más especializados, como raspadores o puntas de lanza. Al mismo tiempo, empiezan a elaborar otros útiles a partir de otros materiales, como el hueso y el asta, para hacer anzuelos para pescar, arcos para lanzar flechas y agujas para coser.

Finalmente, el dominio del fuego desde hace medio millón de años es un progreso muy importante para la humanidad ya que le permite mejorar sus condiciones de vida al poder calentarse, iluminar el interior de las cuevas, elaborar herramientas, cocinar alimentos y protegerse de otros animales.

Otro de los descubrimientos es el uso de las vestimentas elaboradas a partir de las pieles de los animales que cazaban. Estas pieles son raspadas para quitarles la grasa y se dejan secar al sol, para finalmente ser cosidas con agujas de hueso e hilos elaborados de tendones de animales. También confeccionan adornos como collares o decoran su cuerpo con tierra roja.