La Unión Europea (UE) es una organización internacional formada por 27 países unidos por un proyecto político y económico común. Todos sus países miembros ceden parte de su soberanía en el Parlamento europeo, en el que son representados en búsqueda de un bien comunitario. Entre sus principales objetivos, destacan:

• Promover la paz y la igualdad que garantice un Estado de derecho y de bienestar a través de la libertad, la seguridad y el bienestar.
• Gestionar una política internacional propia para solucionar problemas globales y fomentar la ayuda mutua entre los países miembros con el fin de generar su propia prosperidad.

El Imperio romano, Napoleón o Winston Churchill son algunos ejemplos a lo largo de la historia del interés por aunar Europa en una organización que defienda su interés propio y haga frente a los continuos conflictos bélicos.

El primer paso para la formación de la UE fue en 1951, cuando se creó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA), formada por Alemania occidental, Francia, Bélgica, Luxemburgo, Italia y Países Bajos, con el objetivo de liberar la circulación del carbón y del acero.

A partir de entonces se sucedieron una serie de acuerdos claves para la creación de la Unión Europea.

• Con el Tratado de Roma en 1957, firmado por las países anteriormente citados, se creó la Comunidad Económica Europea (CEE), con el objetivo de establecer un mercado común a través de la libre circulación de mercancías, servicios y personas entre los países miembros. Este atractivo acuerdo económico atrajo la incorporación de otros países al proyecto de la futura UE: Reino Unido, Dinamarca e Irlanda en 1973, Grecia en 1981 y Portugal y España en 1986. Alemania oriental tuvo que esperar a su reunificación con la Alemania occidental en 1990.
• La UE surgió con la firma del Tratado de Maastricht en 1993, acuerdo clave para el uso de una moneda común (el euro) desde 2002.
• Con el Tratado de Lisboa en 2009 el Parlamento Europeo amplió sus competencias no solo para tratar los retos mundiales que aún hoy nos afectan (cambio climático, desarrollo sostenible, etc.), sino también para hacer frente a la crisis económica que comenzó en 2008.

Desde entonces, la unión bancaria y las ayudas económicas a sus países miembros han sido claves para lidiar con la larga crisis financiera, pero, sin duda, también tema de debate entre aquellos países con una economía mas consolidada y saneada.

En esta última etapa se incorporaron a la UE países como Austria, Finlandia y Suecia en 1995; Eslovenia, Estonia, Lituania, Chipre, República Checa, Eslovaquia, Hungría y Polonia en 2004; Bulgaria y Rumanía en 2007; y Croacia en 2013.