Tras la expulsión de los franceses y la firma del tratado de Valençay en 1813, el rey Fernando VII vuelve a España recuperando el trono, territorios y propiedades de la corona en 1814. Con su vuelta se restableció la monarquía absoluta y declaraba nula la Constitución de 1812 y los cambios realizados por las Cortes de Cádiz.

La guerra de Independencia tuvo una serie de consecuencias tanto económicas, políticas y sociales. Las consecuencias económicas fueron grandes con la ruina de la agricultura, la pérdida de la industria y del comercio con América. En el ámbito político aunque se restableció la monarquía absoluta, finalmente se impusieron las ideas liberales, pero años después y el inicio de la pérdida de las colonias americanas. Finalmente las consecuencias sociales más importantes fueron el gran numero de fallecidos tras la contienda y la emigración de los afrancesados, élite cultural e intelectual del país.