Los cambios físicos de la materia son aquellos que afectan a su estado o apariencia, pero no a su composición. Son consecuencia del efecto de una fuerza o una energía. Las fuerzas pueden producir movimientos, cambios en la posición y cambios en la forma de los cuerpos.
Deformación
Las deformaciones son cambios físicos que afecta a la forma de la materia. Algunas deformaciones son reversibles, es decir, la materia vuelve a su estado inicial cuando la fuerza deja de actuar. En otras ocasiones, las deformaciones son permanentes, como las fracturas. Las deformaciones permanentes son cambios físicos irreversibles, ya que permanecen a pesar de que desaparezca la fuerza que las provocó.
Dependiendo de las propiedades específicas de la materia y de la intensidad de las fuerzas que apliquemos, la materia puede comportarse de tres maneras:
Comportamiento elástico
Los cuerpos que experimentan este tipo de comportamiento se deforman cuando aplicamos una fuerza sobre ellos, pero vuelven a su forma original cuando desaparece dicha fuerza. Estas deformaciones son, por tanto, cambios físicos reversibles y se deben a una propiedad de la materia llamada elasticidad. Sin embargo, si la intensidad de la fuerza es muy elevada los cuerpos elásticos pueden sufrir deformaciones permanentes, es decir, cambios físicos irreversibles.
Comportamiento plástico
Un cuerpo que manifiesta un comportamiento plástico se deforma cuando ejercemos una fuerza sobre él. Sin embargo, no recupera su forma inicial cuando la fuerza que ocasionó el cambio desaparece. Esta deformación es, por tanto, un cambio físico irreversible y se debe a una propiedad de la materia llamada plasticidad.
Comportamiento rígido
Los cuerpos que experimentan este tipo de comportamiento no se deforman cuando aplicamos una fuerza sobre ellos. Sin embargo, si elevamos la intensidad de la fuerza, pueden llegar a romperse produciéndose un cambio físico irreversible.
Fragmentación
La fragmentación es un cambio físico irreversible que consiste en hacer que un cuerpo se divida en partes o en trozos. Cuando cortamos verduras o sacamos punta al lápiz estamos provocando un cambio físico por fragmentación. Cuando la materia tiene un comportamiento rígido y ejercemos sobre ella una fuerza intensa, puede sufrir una fragmentación.