En este apartado vamos a ver cómo se reproducen las plantas sexualmente, donde es imprescindible que se produzca la fecundación del gameto femenino por parte del gameto masculino, lo cual dará lugar a un nuevo ser. Para que esto sea posible es necesario que la planta posea una parte fundamental, la flor, donde encontramos el órgano sexual masculino y el femenino, en el cual se llevará a cabo la gestación de las semillas para el desarrollo de una nueva planta.

Veamos cómo se produce todo este proceso.

Para poder entender y conocer cómo es el proceso reproductivo, es necesario conocer las partes de la flor y cuál es el cometido de cada una de ellas.

La flor tiene unas estructuras protectoras que son el cáliz (sépalos), que protege el órgano sexual femenino y la corola (pétalos) que protegen y rodean tanto los órganos masculinos como femeninos. Los pétalos suelen ser de colores llamativos para atraer a insectos que ayudarán a las plantas en el proceso reproductor y los sépalos suelen ser verdes y algo más duros.

Los órganos sexuales masculinos son los estambres, donde en su parte más alta, la antera, se encuentra el polen, que a su vez porta los gametos masculinos, mientras que el órgano femenino es el pistilo, compuesto por el ovario en la parte más ancha y baja de este, donde se encuentra el óvulo, que es el gameto femenino,  y un cuello alargado llamado estilo, que termina en su parte más alta por el estigma. Este conducto alargado es por donde bajará el polen hasta el ovario para fecundar el óvulo.

El proceso, llamado polinización, consiste en que el polen que se encuentra en los estambres debe llegar al estigma del pistilo. Esto es posible gracias a la acción o bien del viento, que mueve el polen para llevarlo hasta el pistilo de la flor, o bien por la acción de insectos (como las abejas) que se acercan a las flores para recolectar ese polen y poder hacer miel, impregnándose las patas de este y polinizando otras flores al posarse sobre el pistilo. Una vez que el polen llega al estigma del pistilo, baja por el estilo hasta llegar al ovario y se produce la fecundación cuando se unen ambos gametos, polen y óvulo.

Una vez realizada la fecundación se empezará a desarrollar un embrión que se convertirá en una semilla, la flor pierde los pétalos y empieza a agrandarse el ovario convirtiéndose en un fruto, donde la semilla queda recubierta por una zona carnosa llena de nutrientes. Cuando el fruto llega a su máxima maduración caerá al suelo, donde tras el paso del tiempo y con las condiciones correctas, la semilla germinará y dará fruto a una nueva planta.

Veamos en un vídeo cómo es el proceso de reproducción sexual.