¿Alguna vez has pensado qué ocurriría si dejásemos de replantar zonas boscosas? ¿Conoces los beneficios que la vegetación aporta a las personas y a los animales? ¿Sabes qué ocurriría si la destruyésemos?
Ahora piensa: ¿cómo podemos, las personas, contribuir a mantener nuestro entorno natural cuidado?, ¿crees que sería importante que, desde edades tempranas, se incentivasen prácticas de cuidado y repoblación?
Partiendo de estas reflexiones, se ha diseñado esta situación de aprendizaje, cuya meta es tomar conciencia de la importancia que el entorno natural tiene para la vida, así como desarrollar conductas de cuidado y respeto hacia el mismo. Todo ello, conectado con los retos de la educación del siglo XXI, y más específicamente con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 15 de la Agenda 2030, el cual hace alusión a prevenir, detener y revertir la degradación de los ecosistemas de todo el mundo.
El fin es que el alumnado contribuya, con actividades de su día a día, a la repoblación de especies autóctonas, a la vez que reflexiona y toman conciencia de las diversas conductas que se pueden llevar a cabo para cuidar el medio natural, como la aplicación de la regla de las erres.
Así, a través de las distintas experiencias, actividades y juegos propuestos y utilizando recursos variados, podrán ir adquiriendo nuevos aprendizajes, modificando o enriqueciendo sus conocimientos previos, estimulando su reflexión, y desarrollando actitudes de compromiso activo con el medio natural.