Al hablar de minería siempre nos remontamos a tiempos pasados y la vemos como un sector atrasado y obsoleto. ¡Ni mucho menos! Los productos que se obtienen de las minas son muy necesarios en la actualidad como combustibles, para la obtención de materiales de construcción, joyas o para las nuevas tecnologías.
Por ello, el sector minero debe tener en cuenta varios aspectos para su futuro:
- La necesaria rehabilitación de los espacios afectados por el sector para la convivencia ambiental y la reutilización, por ejemplo, en el sector turístico.
- La minería es un sector que atrae inversión y fija población en pequeñas localidades porque genera empleo. Con todo, se debe tener en cuenta que este puede ser temporal porque depende de su posible agotamiento y siempre se deberían pensar en opciones de continuidad de la economía de la zona cuando esto ocurra.
- Hay que tener en cuenta los productos que se utilizan por la industria en el siglo XXI y los estudios sobre el uso de minerales en nuevas composiciones o materiales para los aparatos electrónicos.
- El sector tecnológico debe ser el tercer eje vertebrador en un triángulo económico junto a la industria y la minería de cara a un futuro próspero para estos sectores.
En conclusión, la actividad minera debe reconvertirse hacia el turismo en los países donde las minas se están agotando. Además, se debe buscar la extracción de otro tipo de productos más utilizados en la industria tecnológica. En aquellos lugares donde el sector minero sigue siendo uno de los principales, normalmente países en vías de desarrollo o subdesarrollo, se debería buscar el equilibrio entre explotación y cuidado del medio ambiente, con acuerdos internacionales y el apoyo de organismos supranacionales.