La importancia de los invertebrados
Los invertebrados son una extensa familia de animales que tiene una gran importancia ecológica. Os preguntaréis cómo pueden ser tan importantes: pues os lo vamos a explicar.
Este gran grupo de animales es fuente de alimento para otros muchos animales más grandes, como los vertebrados, incluidos los humanos. Pulpos, calamares, ostras, cangrejos, mejillones, langostas y muchos invertebrados más forman parte de nuestra dieta. Además, los invertebrados ayudan en el control biológico de plagas y equilibran los ecosistemas. Otra de las funciones que algunos de los invertebrados pueden realizar es la de polinizar, transportando el polen de unas plantas a otras, fertilizándolas y, por lo tanto, haciendo que se reproduzcan. Gracias a los invertebrados podemos disfrutar de frutas y semillas, ya que realizan una labor esencial en la naturaleza.
Muchas especies de invertebrados son utilizados como fuente de materias primas. De las abejas obtenemos miel, jalea real o cera; gracias a los gusanos y sus capullos logramos seda con la que confeccionar prendas de vestir y de las ostras podemos obtener perlas, entre muchos otros ejemplos.
Los invertebrados se ven en peligro debido a la destrucción de sus hábitats mediante la deforestación, la agricultura intensiva o la urbanización de diferentes áreas. Todas estas acciones reducen el espacio donde pueden vivir y les obligan a desplazarse a otras zonas. La contaminación y el cambio climático también afectan a la supervivencia de los invertebrados dado que son especialmente sensibles a los cambios en el medio ambiente. Es importante cuidar y mantener la naturaleza y nuestro entorno para evitar la disminución de las colonias de invertebrados, así como la extinción de algunas de sus especies.