Tipos de gusanos
Nematodos
Los nematodos son animales invertebrados pertenecientes al grupo de los gusanos. Por lo tanto, su cuerpo es blando y con forma cilíndrica, sin anillos o partes de su cuerpo diferenciadas. Son los típicos gusanos redondos con forma cilíndrica, aunque algunos tienen un tamaño muy pequeño, casi microscópico.
Este tipo de gusanos puede vivir de forma libre tanto en entornos terrestres como acuáticos o parasitar tanto plantas como animales. Ejemplos de parásitos nematodos son el parásito de la soja, un gusano que se desarrolla en las raíces de la planta de la soja y daña la planta de forma que esta no se desarrolla con normalidad. Se puede saber si la planta está infectada debido a su escaso crecimiento.
Otro nematodo famoso es el anisakis que no solo parasita a peces y otros animales marinos, sino que puede alojarse en el cuerpo de los humanos cuando comemos pescado crudo o poco cocinado. Si esto ocurre es necesario ser tratado en el hospital.
No todos los nematodos son parásitos, otros viven si necesidad de depender de un huésped y son benéficos para el ser humano.
Anélidos
Los anélidos son gusanos blandos y cilíndricos, pero, a diferencia de los nematodos, tienen su cuerpo dividido en anillos claramente reconocibles y de igual tamaño. Suelen vivir en lugares muy húmedos y con poca luz.
Muchos de ellos son acuáticos, como la sanguijuela, aunque también los podemos encontrar en entornos terrestres, como la lombriz de tierra. Los anélidos acuáticos respiran a través de branquias, mientras que los terrestres a través de la piel húmeda.
Muchos anélidos tienen unos pelos o cerdas llamadas quetas que les sirven para desplazarse y les ayudan a captar las vibraciones del suelo y así poder huir de sus depredadores. Las lombrices de tierra poseen estas quetas y se desplazan por encima y debajo de la tierra. Gracias a este movimiento, la tierra del suelo se oxigena y los nutrientes de la misma se mezclan y reparten por todo el terreno por la que transitan.
Por su parte, las sanguijuelas suelen vivir en entornos de agua dulce. Son parásitos y tienen una ventosa que se adhiere a su presa para succionar sangre que acumula en un órgano llamado buche, que puede aumentar hasta cinco veces su tamaño. Por ese motivo, las sanguijuelas han sido utilizadas con fines medicinales.
Platelmintos
Estos gusanos absorben el alimento del exterior, pues su sistema digestivo está incompleto. La carencia de órganos facilita su forma plana. Tampoco tienen sistema circulatorio y respiran por su piel húmeda al absorber el oxígeno del ambiente.
La planaria es uno de los platelmintos más conocidos que vive en medio acuático, mientras que la tenia es un peligroso parásito que se puede desarrollar en el intestino humano.
Las planarias son muy comunes en entornos acuáticos de todo el mundo. Muestran una gran capacidad de regeneración cuando pierden una parte de su cuerpo. Se alimentan de pequeños invertebrados, incluidos otros los gusanos.
Por otra parte, la tenia es un parásito que se propaga a través de la carne de cerdo contaminada con los huevos de este gusano. Una vez ingerida la carne, la tenia se desarrolla dentro de los intestinos y allí se agarra con las ventosas que tiene en la cabeza, para nutrirse del mismo alimento que el ser humano. Es necesario tratamiento médico para poder librarse de ella.