Saltar la navegación

Estado centralizado o Estado descentralizado

¿Qué diferencia hay entre un Estado centralizado y un Estado descentralizado?

Un Estado centralizado es aquel en el que la administración central gobierna todo el territorio estatal, si bien, al mismo tiempo, pueden existir instituciones de carácter regional y local, aunque sometidas a la toma de decisiones de la administración central. 

De esta forma, un Estado centralizado asume todas las competencias de un país, mientras que sus instituciones regionales y locales no tienen autonomía para tomar una serie de decisiones como puede ser la contratación de sus trabajadores públicos, es decir, para la contratación de sus funcionarios. 

Este tipo de Estado tiene como precedente la forma de organización territorial de un estado de soberanía absoluta, como la monarquía francesa del “Rey Sol” Luis XIV, ejemplo también de la concentración de poderes legislativo, ejecutivo y judicial. Se trata de un modelo de Estado centralizado que evoluciona a un modelo de soberanía nacional donde sus representantes son elegidos por su población.

Otros ejemplos de Estado centralizado de nuestra historia reciente son los regímenes totalitarios de Hitler en Alemania, Mussolini en Italia, Stalin en la URSS y Francisco Franco en España, caracterizados por la concentración de poderes en su persona, además de una violenta represión. 

No obstante, el modelo de Estado centralizado no implica que no pueda ser un Estado democrático. Hoy en día, ejemplos de Estados centralizados son Francia, Egipto, Portugal y Ecuador. 

Fotografía del Palacio de Versalles, Francia
Wikimedia Commons/Eric Pouhier. Palacio de Versalles, Francia (CC BY-SA)

Por su parte, un Estado descentralizado es aquel en el que la constitución delega a las instituciones territoriales una serie de competencias (poderes) en distintas materias, como pueden ser las competencias en materia de educación, sanidad, transporte, justicia, entre otras. A pesar de esta delegación del poder a administraciones territoriales, existe el principio de subsidiaridad, es decir, el Estado central puede trabajar en equipo con el área regional en competencias delegadas, muy útil para abordar el desarrollo integral del país, por ejemplo, en la mejora de los medios de transportes.

Del mismo modo que la administración central cuenta con sus propias instituciones, la organización de cada territorio está administrada con instituciones propias como son los parlamentos, gobiernos autonómicos, tribunales de justicia, ayuntamientos, etc. siendo sus representantes políticos elegidos por la población de su territorio. 

Un precedente de la forma de Estado descentralizado lo encontramos en el Imperio romano: en lugar de tratar de controlar todas las ciudades, fragmentó el territorio conquistado en provincias. Este modelo respondía al principio divide et impera (divide y vencerás), estrategia utilizada para controlar el territorio bajo dominio romano, al mismo tiempo que consiguió evitar la organización de distintos grupos en pos de un objetivo común frente al poder central, Roma. Además de evitar posibles revueltas, con esta estrategia el Imperio romano logró una organización territorial leal a Roma, ya que cada ciudad debía competir para conseguir la ciudadanía romana y, así, obtener una serie de privilegios.

Dentro de este tipo de Estado descentralizado, diferenciar dos tipos:

  • Estado autonómico, es decir, el Estado comparte con las comunidades autónomas una serie de tareas organizativas.  Ejemplos de este modelo autonómico son España e Italia.
  • Estado federal, es decir, el Estado está formado por una serie de gobiernos federales, con sus propias instituciones, pero con un gobierno común a todas ellas. Ejemplos de este modelo federal son Alemania, los Estados Unidos y Brasil.
Fotografía fachada del Congreso de los diputados, Madrid España
Wikimedia Commons/Juliandelbasto. Congreso de los diputados, Madrid España (CC BY-SA)

Preparados, listos... ¡a completar!

Lee los siguientes enunciados y completa los huecos en blanco con la opción correcta.

Cuando una administración regional no tiene autonomía para tomar una serie de decisiones porque esa competencia no ha sido delegada y pertenece a la administración central, nos encontramos ante un Estado

Caso contrario es un Estado que delega a las administraciones de menor rango territorial una serie de  como son las referentes a sanidad, educación y justicia, entre otras.

No obstante, existe la posibilidad de que el Estado central pueda trabajar en equipo junto con la administración regional sobre una serie de competencias delegadas gracias al  .

Habilitar JavaScript

Ahora ¡A investigar!

Duración:
15:00
Agrupamiento:
2
Ilustración ¡A investigar!
María Guadalupe Castillo Alfaro. ¡A investigar! (CC BY-SA)

¿Sabrías identificar las principales competencias autonómicas y estatales del Estado español?

Retomamos el documento de la Constitución Española de 1978 para identificar al menos diez competencias delegadas a las Comunidades Autónomas y otras diez competencias exclusivas del Estado.

Realiza en tu cuaderno un cuadro síntesis siguiendo la siguiente estructura:

Competencias de las Comunidades Autónomas Competencias exclusivas del Estado