Consecuencias
En esos últimos años el gobierno, y en parte también la sociedad, se dividía entre los inmovilistas, partidarios de la situación no cambiara (algunos por mantener sus privilegios y otros por miedo a una nueva guerra civil) y los aperturistas, partidarios de ir aumentando poco a poco las libertades civiles (algunos con la simple intención de limitar la represión y otros con una intención abiertamente democrática).
La crisis mundial de 1973, provocada por el aumento del precio del barril de petróleo tras los acuerdos alcanzados por los países exportadores de petróleo (OPEP) afectó profundamente a la economía española. La principal consecuencia fue el regreso de muchos de los que habían emigrado en la década anterior, expulsados de un mercado de trabajo europeo que ya no tenía capacidad para absorberlos. Eso trajo consigo, a su vez, el aumento del paro en España.
La crisis también provocó la caída del turismo, que hasta entonces aumentaba sus cifras cada año, aunque el cambio de mentalidad que había producido en la sociedad española no tenía vuelta atrás. La llegada de los antiguos emigrantes también colaboró a aumentar las ganas de libertad de la sociedad española, que con unos y con otros abría los ojos a un mundo diferente.
La economía española, en cualquier caso, había conseguido situarse como décima potencia industrial del mundo, pero el desigual reparto geográfico de este logro profundizó aún más el éxodo rural, y la situación precaria de los barrios obreros de las grandes ciudades, especialmente Madrid y Barcelona.
Por lo que respecta a la oposición al régimen, esta se centraba en tres sectores:
- Los sindicatos clandestinos, que elevaron el nivel de conflictividad laboral y organizaron huelgas que acabaron con muchos sindicalistas presos en las cárceles franquistas, como es el caso de Marcelino Camacho, fundador de las por entonces ilegales Comisiones Obreras (CC.OO).
- El movimiento universitario, formado no solo por estudiantes, sino también por profesores disconformes con la falta de libertad.
- La Iglesia Católica, que vio cómo cientos de sus sacerdotes fueron encarcelados por expresar su desacuerdo con la dictadura y cuya jerarquía se debatía entre el apoyo y el rechazo al franquismo.