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Sujeto oracional y tipos de oraciones

Introducción

Como decíamos anteriormente, para llevar a cabo un buen estudio de los enunciados oracionales y su análisis, hay que tener en cuenta la interrelación de estos tres principios básicos:

  • Aprender el sistema de análisis.
  • Comprender el significado de los enunciados.
  • Llevar siempre un orden.

La convivencia de estos tres fundamentos será de gran ayuda para poder adentrarse en el análisis sintáctico sin perderse, descubrir los fallos cometidos y evaluar el trabajo realizado.

Brújula sobre una roca
StockSnap. Rocks (Pixabay License)

Para realizar cualquier análisis sintáctico, es primordial aprenderse las indicaciones, reglas y pautas de comportamiento del enunciado, para tener una base que nos ayude a identificar los posibles errores que se puedan cometer (es algo parecido a lo que ocurre en ciencias con las fórmulas matemáticas). Se deberá también poseer un buen nivel de comprensión textual, pues en el enunciado está la clave. Y, por último, también es necesario trabajar con orden a la hora de llevar a cabo cualquier análisis, actitud primordial para no perderse en ningún momento.

La creación de enunciados oracionales está ligada al código de nuestra lengua. No debemos olvidar que la base del código se asienta en los fundamentos de la lógica, lo que quiere decir que siempre, aplicando las pautas que se expliquen, el alumnado estará en posesión de herramientas para identificar el acierto o error de sus propias actividades.

Y es que no debemos olvidar que aprender a analizar enunciados correctamente, comprender cómo se construyen y localizar los fallos, sirve para poder expresarnos y comprender, correctamente y con propiedad, textos orales y escritos, así como puede facilitar también el estudio de otros idiomas.

Localización del Sujeto oracional

Como ya se ha visto en otros recursos, de forma general todas las oraciones están estructuradas en sujeto y predicado, tradicionalmente "aquello de que se dice algo" el primero y "lo que se dice del sujeteo" el segundo (Alarcos Llorach, 1999).

carretera con un arcoíris al fondo
Free Photos. Rainbow (Pixabay License)

Para comenzar a analizar sintácticamente enunciados oracionales simples, lo primero que habrá que tener en cuenta es que dicho enunciado dispondrá únicamente de un solo verbo (bien en forma simple, compuesta o perifrástica) que funcionará como núcleo del grupo verbal, predicado. Dicho elemento verbal será el que servirá para establecer las pautas que nos servirán para delimitar el espacio del sujeto y del predicado en la oración. Para ello, a lo largo de la historia del análisis sintáctico, se han establecido varios métodos para identificar el sujeto (preguntas al verbo, sustitución pronominal, etc.), aunque, debido a su baja eficacia y la generación de dudas y análisis erróneos, aquí se va a plantear una metodología basada en la concordancia en número y persona que se establece en todas las oraciones entre el núcleo del sujeto (sustantivo o pronombre) y el núcleo del predicado (verbo).

Pautas para identificar el Sujeto oracional

Para llevar a cabo esta explicación, utilizaremos como ejemplo una de las típicas oraciones que suele generar dudas: A Luis le duele el brazo.

  1. En primer lugar habrá que localizar el verbo de la oración. A Luis le duele el brazo.
  2. El siguiente paso será determinar en qué persona y número se encuentra. En este caso concreto, duele: 3ª persona del singular.
  3. A continuación, manteniendo la misma persona (1ª, 2ª o 3ª), modificaremos su número de singular a plural o viceversa. duele: 3ª persona del singular > duelen: 3ª persona del plural.
  4. El siguiente paso es utilizar el verbo del apartado anterior para sustituirlo en la oración por el verbo original. A Luis le duele el brazo. > A Luis le duelen el brazo.
  5. Si la oración resultante es agramatical, bastará hacer coincidir en el mismo número (de singular a plural, o viceversa) el elemento correspondiente para que concuerde con el "nuevo" verbo y, con ello, la oración será correcta. *A Luis le duelen el brazo > A Luis le duelen los brazos.

El elemento que cambiemos en el apartado 5.º, para que la oración resulte correcta, será el sujeto de la oración (en este caso el brazo, los brazos).

figura de excursionista de Lego
Aitoff. Hiker (Pixabay License)

Además de los cinco pasos para localizar el sujeto, hay que tener en cuenta estas tres situaciones posibles:

  1. Si llegados al punto 4.º la oración resultante es gramaticalmente correcta, nos encontraremos ante una oración con sujeto omitido. Iré al cine mañana > Iremos al cine mañana.
  2. Si la oración tiene un verbo copulativo (ser, estar, parecer...), hay que tener cuidado porque, al llegar al punto 5.º, para hacer gramaticalmente correcta la oración, deberemos cambiar de número palabras que se encuentren en el predicado, concretamente el atributo. Yo soy muy alto > Nosotros somos muy altos. Habrá que recordar que, en las oraciones con verbo copulativo, el sujeto es de quien se nos dice una cualidad específica acerca de qué es, cómo está o qué parece.
  3. Hay que tener cuidado con las oraciones impersonales, porque pueden inducir a crear falsos sujetos, como suele ocurrir con las impersonales con verbo "haber". En la carretera había muchos coches. > *En la carretera habían muchos coches. Estas oraciones nunca tienen sujeto y su verbo no se puede enunciar en plural.

En busca del sujeto

Localiza el sujeto de los siguientes enunciados siguiendo los pasos explicados:

  • Se ha encontrado Inés un billete en el suelo.
  • Este libro está desencuadernado.
  • Mañana será lunes.
  • Este cuadro fue pintado por Velázquez.
  • A Miguel le apetece un trozo de pizza.

Estructura y tipos de oraciones

En nuestra lengua el orden de los constituyentes sujeto y predicado no tiene una posición fija en la oración. Por dicho motivo nos podemos encontrar en castellano oraciones construidas de la siguiente manera:

  1. Sujeto + predicado. Juan está en su casa.
  2. Predicado + sujeto. Llegaron tarde tus hermanos.
  3. Todo predicado (oración con sujeto omitido). Jugaremos el partido el viernes.
  4. Todo predicado (oración impersonal). Mañana lloverá en Burgos.
  5. Predicado + sujeto + predicado (predicado partido, en una de las dos partes irá el núcleo verbal). Esta mañana Juan trajo la compra.

La única estructura que no es posible en nuestro idioma es Sujeto + Predicado + Sujeto. Un sujeto múltiple partido no es posible.

Además no hay que olvidar los tipos de oraciones estudiados:

  • Copulativas/predicativas. Oraciones con verbo copulativo y atributo, frente a las que tienen verbo predicativo.
  • Transitivas/intransitivas. Oraciones con verbo que necesita de complemento directo, frente a las que no.
  • Activas/pasivas. Oraciones con sujeto agente, frente a las que tienen sujeto paciente.

Estructuras...

Indica con el número del 1 al 5, según la clasificación del apartado "Estructuras oracionales", qué estructura poseen las siguientes oraciones.

  • En nuestra clase hay veinte alumnos este curso.
  • Este mapa está muy doblado.
  • Han subido tus hermanos todas las cajas del sótano.
  • ¿Has terminado ya los deberes?
  • A tu hermana le fascinan los cómics.

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