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Tipos de huesos

Los huesos del esqueleto son de múltiples formas, y, en función de su forma y colocación en el esqueleto, podrán realizar un tipo de movimiento y una función.

Podemos distinguir diferentes tipos de huesos:

  • Huesos planos: son aquellos que protegen los órganos internos de nuestro cuerpo, como el cráneo, la escápula, las costillas, el esternón y la pelvis.
  • Huesos largos: son aquellos que soportan el peso de todo nuestro cuerpo y nos ayudan a realizar movimientos, como la clavícula, el húmero, el radio, el cúbito, los metacarpos y las falanges, en las extremidades superiores; y la tibia, el peroné, el fémur, los metatarsianos y las falanges, en las extremidades inferiores.
  • Huesos cortos: son aquellos que proporcionan estabilidad a los movimientos que pueden realizar, como los huesos carpianos de las muñecas y de los tobillos.
  • Huesos irregulares: son aquellos huesos con formas complejas y que ayudan a proteger algunos órganos, como la mandíbula, el sacro, el coccix, las vértebras, los huesos irregulares de la columna vertebral y de la pelvis.
  • Huesos sesamoideos: son huesos insertados en los tendones de las manos, pies y rodillas. Se encargan de proteger a los tendones de su uso y estrés, como, por ejemplo, la rótula.

A continuación, puedes ver una imagen de los distintos tipos de huesos del esqueleto humano y un ejemplo de cada uno.

Tipos de huesos del esqueleto humano
Imagen creada por Laura cepeda Del Rosal a partir de la imagen de Wikimedia Commons/bruceblaus. Clasificación de los huesos (CC BY)