El Realismo fue un movimiento artístico que pretendía reflejar la realidad lo más fielmente posible. Nació en Francia en la primera mitad del siglo XIX y tuvo como máximos representantes a autores como Balzac y Flaubert. Honoré de Balzac fue el verdadero iniciador del Realismo en Francia con su obra La comedia humana, en la que quiso reflejar la sociedad francesa del momento. Por su lado, Gustave Flaubert, desarrolló la estética realista en sus novelas, en las que pretendió diluir lo máximo posible al narrador. Su obra más importante y conocida es Madame Bovary.

En España, se desarrolló en la segunda mitad del siglo XIX: tuvo su máximo apogeo en la década de 1880, aunque se inició en los primeros años de la década de los 70 del siglo XIX, después de La "Gloriosa". Es importante este acontecimiento histórico, ya que es el reflejo del triunfo de la burguesía y su involucración en el poder. Por supuesto, también tuvo que ver la influencia de los autores extranjeros antes nombrados.

Las características más importantes del movimiento son:

• Objetivismo: frente al subjetivismo romántico, el realismo se basa en la observación meticulosa de la realidad. La descripción adquiere un papel fundamental, ya que es el instrumento necesario y perfecto para reflejar en la obra de arte la realidad de la forma más fiel.
• Ideología: el autor pretende convencer al lector sobre una idea, un modelo de vida o una crítica social.
• Contemporaneidad: la acción está ambientada en el momento en que se escribe la obra. A diferencia del Romanticismo, no hay huida hacia otros lugares u otros momentos de la historia. Hay un reflejo de todas las clases sociales, aunque se da un predominio de los ambientes de clase media.

El Naturalismo puede ser considerado como un "Realismo extremo". Surgió también en Francia en la segunda mitad del siglo XIX. La temática naturalista está centrada en el ser humano que está determinado por su herencia genética y el ambiente social en el que vive. La finalidad del Naturalismo es denunciar las injusticias sociales, especialmente las que se producen con los más desfavorecidos.

Tuvo como máximo representante al autor (también) francés Émile Zola, quien propuso aplicar el método científico a la literatura, en un momento en el que el Positivismo era la corriente filosófica y de pensamiento más importante (solo era válido aquello que pudiera ser demostrado por la ciencia, demostrable, tangible). Una de sus obras más destacas es Germinal, que pertenece a una colección de novelas en las que refleja la vida de una familia francesa.

En España, los escritores trataron el Naturalismo a través de las descripciones minuciosas y una mayor presencia de los diálogos de los personajes y no de las intervenciones del narrador. También se dio importancia al medio físico en el que se desenvolvían las historias y sus personajes; todo enfocado al simulacro de apariencia de realidad.