La cohesión del texto
Cuando hablamos de texto pensamos en cualquier forma de comunicación cuyo mensaje tiene sentido unitario y transmite una información completa. Para que un texto actúe de este modo y permita que el receptor comprenda su significado e intención, debe cumplir tres condiciones, que son las denominadas propiedades textuales: la adecuación, la coherencia y la cohesión.
La cohesión es la propiedad textual en la que cada enunciado se relaciona con los demás mediante una serie de mecanismos que permiten la unidad y la coherencia del texto.
Corresponde al emisor establecer los mecanismos de cohesión y al destinatario reconocerlos, facilitándole de este modo una correcta interpretación del texto. Para construir la cohesión textual, se recurre a una serie de procedimientos o mecanismos que, como si de materiales de un edificio se tratasen, establecen relaciones entre las diversas unidades que conforman el texto (palabras, enunciados, párrafos...) uniéndolas y cohesionándolas para formar una unidad textual.
Aunque los mecanismos de cohesión se encuentran muy relacionados con la propiedad textual conocida como coherencia, la cohesión se reserva para hablar de las relaciones que se producen en la superficie del texto.
Mecanismos léxicos y semánticos
Otorgan claridad y precisión al texto; entre los principales mecanismos léxicos y semánticos nos encontramos con:
- la repetición léxica, que consiste en repetir las mismas palabras para transmitir la sensación de que se está hablando siempre del mismo tema.
- la recurrencia semántica, que contribuye a la cohesión textual por medio de la aparición de palabras de su mismo campo semántico o de experiencia, del empleo de sinónimos y antónimos relacionados con ella, así como también del uso de los hiperónimos y los hipónimos.
A continuación presentamos algunos ejemplos de estos mecanismos léxico-semánticos:
Repetición léxica
La semilla, simiente, pepa, pipa o pepita es cada uno de los cuerpos que forman parte del fruto que da origen a una nueva planta; es la estructura mediante la cual realizan la propagación de las plantas que por ello se llaman espermatofitas (plantas con semilla). La semilla se produce por la maduración de un óvulo de una gimnosperma o de una angiosperma. Una semilla contiene un embrión del que puede desarrollarse una nueva planta bajo condiciones apropiadas
Fragmento extraído del artículo "Semilla" de Wikipedia.
Campo de experiencia de la escuela:
La mesas de la clase estaban llenas de libretas, bolígrafos y libros de textos, todos ellos distribuidos de forma desordenada por los diferentes pupitres. El borrador y las tizas se encontraban junto a la pizarra, aunque también había un par de ellas repartidas por la mesa del profesor.
Sinónimos y antónimos
Para ser su primer día en el nuevo centro se encontraba alegre y jovial y apenas se veía en ella un atisbo de miedo o temor a enfrentarse al nuevo alumnado y a la nueva profesión; al contrario mostraba una enorme tranquilidad, como si llevase años y años esperando ese momento.
Hiperónimos e hipónimos
El monte ofrecía una vista repleta de árboles, junto a los cipreses, olivos y encinas, alternaba el manto blanco que ofrecían los almendros en flor. Sentada a la sombra de un algarrobo se dejaba deleitar por los colores de la primavera.
Mecanismos gramaticales y sintácticos
Los principales mecanismos gramaticales son:
- la sustitución de elementos que ya ha aparecido en texto y evitan, de este modo, las repeticiones innecesarias:
Me gusta mucho ese profesor. Él es mi tutor y me da la asignatura de matemáticas.
Tengo muchos libros de aventura y ciencia ficción, pero estos son mis preferidos.
Las anáforas y catáforas son procedimientos de cohesión textual que sirven para hacer referencia a algo del discurso que se ha dicho o que se va a decir:
Tienes que hablar con Martín si quieres ayudarlo. (anáfora)
Le dije que no iría a María. (catáfora)
- la elipsis o supresión de un elemento lingüístico anterior que queda sobreentendido por el contexto:
Comeré espaguetis boloñesa y ella, macarrones solo con mantequilla. (El verbo aparece elidido para evitar la repetición que resultaría muy pesada)
Los conectores textuales son mecanismos sintácticos que permiten poner en relación párrafos enteros o un conjunto de enunciados considerándolos como un solo bloque. Los hay de muchos tipos atendiendo a la relación que establecen con los distintos enunciados: de adición (además, incluso...), de contraste (pero, sin embargo, no obstante...), de explicación (esto es, es decir...). Sin intención de ofrecer una lista exhaustiva de todos las relaciones que pueden propiciar, dedicaremos un apartado del recurso a trabajarlos.