El siguiente fragmento, que recupera el narrador omnisciente, ofrece un contrapunto interesante a los dos anteriores. Quienes establecen el diálogo son un grupo de chicas. La autora no atribuye ninguna intervención a un personaje concreto. Esta inconcreción le otorga al diálogo un anonimato significativo, pues no busca definir a los personajes sino hacer patente la forma de pensar de las chicas pertenecientes a la burguesía salmantina (convirtiéndose así ellas mismas en agentes transmisores de los valores sociales). (Capítulo 14).
«Tea Rooms», de Luisa Carnés, en el horizonte de la literatura feminista y comprometida
Texto 4
Lectura
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FRAGMENTOS TEXTO Carmen Martín Gaite: Entre visillos, 1957 (Destino, 2017, p. 228) |
Cuestiones para el coloquio
1. Tratad de relacionar este fragmento con los dos anteriores. ¿Cuál era la forma de ascender socialmente de las chicas de las clases acomodadas durante los años 50? ¿Qué proyecto personal guiaba su horizonte de futuro? ¿Qué elementos forman parte de ese modelo aspiracional, relacionado con el inmediato desarrollismo franquista y la incipiente sociedad de consumo en España?
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