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Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP)

El Aprendizaje Basado en Proyectos es un marco que admite la inclusión de otras metodologías activas y que ofrece los elementos y estructura básicos que cumplen con las condiciones para la enseñanza de las competencias y los 7 principios indispensables para crear ambientes de aprendizaje eficaz. 

Fundación General de la Universidad de La Laguna. Entrevista a Juan José Vergara (Licencia estándar de YouTube)

Esta metodología posee un diseño y planificación flexible, con una estructura organizada en fases en las que se realiza una investigación y se crea un producto final. En este proceso interviene todo el alumnado, desde sus fortalezas y debilidades, en equipos cooperativos que dan valor a la diversidad personal y propicia el desarrollo social e individual. Se realiza una evaluación continua de los aprendizajes, en la que todos los agentes participan, se promueve así la autorregulación, la reflexión, el pensamiento crítico y la toma de decisiones, es decir, habilidades imprescindibles para que se produzca un aprendizaje profundo.

Ideas clave y referencias

Características

La experiencia de aprendizaje se presenta como un proyecto interdisciplinar en el que se integran todos los elementos que constituyen el proceso de enseñanza-aprendizaje competencial. Se propone un reto real, bien contextualizado, significativo y ajustado a las capacidades del alumnado, y con cierta complejidad en función de su desarrollo psicoevolutivo. Para su resolución es necesario tener en cuenta su capacidades, partir de sus conocimientos previos y proponer tareas y actividades que implican la movilización de recursos y saberes relacionados con diferentes competencias específicas de diferentes áreas de conocimiento y/o disciplinas. Todo ello para conseguir un producto final que se difunde y tiene una repercusión en su entorno más cercano y que es la síntesis y la evidencia del aprendizaje realizado a lo largo de la experiencia.

Las tareas están diseñadas con el objetivo de que el alumnado realice procesos de los diferentes niveles cognitivos (taxonomía de Bloom) y progrese en el desarrollo de las competencias clave atendiendo a sus capacidades.

Esta metodología garantiza la educación personalizada y la inclusión ya que toma en cuenta e integra los principios del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA): proporcionar múltiples medios de acción y de expresión, múltiples formas de representación de la información y, por último, proporcionar múltiples formas de implicación del alumnado. Por esta razón, en el diseño ABP se tienen en cuenta estrategias para la autorregulación, el aprendizaje autónomo y la metacognición. Así mismo, se acompaña y guía al alumnado, mediante procesos de autoevaluación y coevaluación y se potencian herramientas como el diario de reflexiones, para ayudarles en el reconocimiento de sus fortalezas, sus debilidades y/o errores para que puedan aprender de ellos.

La clave del ABP está en la variedad de propuestas que se ofrecen, que deben ir más allá de realizar investigaciones sobre un tema. Así, hacer que el grupo-aula actúe y piense como un científico, un diseñador, un historiador, etc., posibilita el desarrollo del pensamiento científico, crítico y creativo ofreciéndole experiencias que aúnan el trabajo de las competencias del curriculum y las problemáticas reales que le acercan al conocimiento más profundo de la sociedad en la que vive.

En esta metodología es fundamental ser riguroso en el diseño de los proyectos por lo que es necesario informarse, documentarse y aprender de los expertos atendiendo al tipo de proyecto elegido (tecnológico, científico, literario, de diseño, etc.). En este punto, el trabajo interdisciplinar del profesorado puede lograr unas propuestas mucho más complejas y enriquecedoras que el diseño individual.

Fases

La secuencia de actividades se estructura en tres fases. 

  1. En la fase inicial las actividades tienen como objetivo motivar al alumnado, crear interés hacia la propuesta de trabajo presentada, activar sus conocimientos previos y organizar el trabajo individual y del equipo. El alumnado se organiza en equipos cooperativos donde se distribuyen funciones y roles y se organiza/planifica el trabajo.
  2. En la fase de desarrollo las tareas se centran en los procesos de planificación, investigación, análisis, síntesis y valoración. En ellas se elaboran productos necesarios para el logro del producto final.
  3. Fase final, donde el alumnado crea el producto final, lo difunde y evalúa, así como también evalúa su trabajo individual y el del equipo.

Referencias y ejemplos

Creado con eXeLearning (Ventana nueva)