Saltar la navegación

Dramático

Échale teatro

Cuando alguien dice «échale teatro» se está refiriendo a fingir o exagerar algo que te pasa. El género dramático también recibe el nombre de género teatral y se refiere a las obras que están pensadas para ser representadas. No obstante, al hablar de género dramático como uno de los géneros literarios, tenemos que partir de la base de un texto literario cuya finalidad es la representación pero que también se puede leer como se lee una novela o un poema. 

La característica principal del texto teatral es que se trata de un diálogo entre personajes, es decir, que no hay un narrador que nos vaya introduciendo en la historia sino que conocemos lo que pasa directamente por las conversaciones que tienen los personajes. A veces se piensa que sí hay narrador en la historia porque encontramos unas frases que están fuera de la acción teatral y que sirven para orientar a los actores y al director. Estas frases se llaman acotaciones y las pone el autor para hacer indicaciones sobre el espacio donde se desarrolla la acción, el tiempo en el que se enmarca así como las emociones con las que los personajes dicen las frases del diálogo. Además del diálogo, los personajes suelen tener parlamentos en los que piensan en voz alta. A esto se le llama monólogo porque no hablan con nadie. También suele pasar que algunos personajes, generalmente cómicos, hacen apartes: dicen algo para que el público lo oiga pero el resto de personajes simula no haberlo oído. No es que un personaje hable con el público: consiste en decir una frase aparte fingiendo que nadie más le oye. 

Las obras teatrales suelen estructurarse en actos y los actos se dividen en escenas. Podríamos decir que los actos son como los capítulos de una novela y las escenas se marcan con la entrada o salida de los personajes. 

Dibujo de las máscaras del teatro
The Noun Project / HeadsofBirds. Máscaras del teatro (CC BY)

Al igual que sucedía con el género lírico o narrativo, la división en subgéneros se hace según el tema que se esté tratando en la obra teatral. De esta manera, podemos hablar de los grandes subgéneros teatrales que son la tragedia, si se tratan hechos graves con un tono serio y el desenlace es triste; comedia, si son hechos cotidianos tratados de forma cómica y tiene un final feliz, y la tragicomedia o drama que consiste en mezclar elementos trágicos con otros cómicos. 

Además del texto literario, el género dramático usa otros códigos que tienen que ver con su representación. Desde la Antigüedad, los griegos y los romanos usaban el teatro como espectáculo. Al entenderlo precisamente como un espectáculo, entran en acción toda una serie de elementos que contribuyen a la puesta en escena: desde la interpretación de los actores hasta el maquillaje, vestuario, luces, sonido, decorados... Todos los elementos son importantes y todas las personas que trabajan para que una obra de teatro se represente tienen un papel fundamental. El equipo debe estar bien organizado por el director que dirige una gran orquesta de personas para que el engranaje teatral funcione. 

Cuando asistimos al teatro parece que lo que está pasando delante de nosotros es verdad. Los actores reencarnan a los personajes, les dan vida porque viven en sus propias carnes las sensaciones y emociones que siente el personaje. Tal vez la magia del teatro sea precisamente esa: tener la capacidad de darle vida a la literatura. 

Teatreros

Vamos a leer este texto teatral del libro Por qué tiene que ser todo tan difícil, de Nando López, y responder a las siguientes preguntas:

  • ¿Cuántos personajes intervienen?
  • ¿De qué están hablando?
  • ¿Se parece esta conversación a las que tú tienes con tus amigos? ¿Por qué?
  • Identifica las acotaciones y anota qué elementos necesitarías para hacer esta escena en un teatro. 

VERO coge la guitarra, como si fuera a tocar algo. Pero, de repente, se detiene.
VERO:
¿A vosotros no os pasa?
La miran sin saber a qué se refiere.
VERO:
¿No tenéis dudas?
GUILLE:
¿De qué?
VERO:
No sé, de todo. De si os gusta lo que creéis que os gusta. De si valéis para lo que creéis que valéis. De si sois buenos de verdad o solo os lo dicen para que no os desaniméis… Cada vez que el del conservatorio me repite que valgo para esto, me gustaría preguntarle si me lo suelta para que no abandone o porque lo piensa de verdad.
CELIA:
¿Y tus madres?
VERO:
Mis madres no cuentan.
ALBA:
¿Y por qué no?
VERO:
Primero, porque no tienen ni idea de música. Si me dicen que toco bien hasta cuando desafino… Y segundo, porque están empeñadas en «que no me frustre». Que lo hacen con buena intención, pero…
GUILLE:
Si necesitas que sean más directas, te presto a los míos. Mis padres seguro que no se cortan.
VERO:
(Seria) Lo que necesito es que me digan la verdad. Que alguien me mire a los ojos y me diga si voy bien o si debería pasar de la música, aceptar que soy mala, o que soy lo peor, y ponerme con otra cosa.
GUILLE:
(Arrepentido de haber forzado tanto la conversación) Perdona, Vero, hoy tengo un mal día.
VERO:
(Con ironía) ¿Un día de «estoy realista»?
GUILLE asiente.
VERO:
No pasa nada, Guille. Es solo que es raro, ¿sabes? Es raro sentir que vales para algo y no poder estar segura de si es verdad o si solo te lo parece a ti.
ALBA:
Si yo dudase tanto, no habría ganado ni un combate.
VERO:
Pues ya se me podía pegar algo…
ALBA:
Que no es que no dude…

Nando López. Por qué tiene que ser todo tan difícil. Editorial: Loqueleo

A continuación, vamos a dividirnos en grupos de tres para poder representarlo haciendo lo que pone en las acotaciones. 

¿Hablamos?

En la actualidad una de nuestras vías de comunicación son las aplicaciones de mensajería instantánea. En este tipo de diálogos se mezclan las características del texto escrito y del texto oral. Es posible que la comunicación que tenéis con otros amigos se parezca mucho a las conversaciones que tenéis cara a cara. Sin embargo, a veces pasa que nos atrevemos a escribir cosas que nunca diríamos o alguien no entiende bien nuestro mensaje. Para que alguien entienda bien nuestros mensajes, solemos usar emoticonos, que son algo parecido a las acotaciones del teatro. 
A continuación, vamos a hacer un ejercicio por parejas teniendo todo esto en cuenta. En primer lugar, vamos a escribir un diálogo que podríamos tener por mensaje instantáneo. Después, tendremos que representarlo ante la clase. 

Una pantalla de móvil con la interfaz de Whatsapp
Isabel Cortijo Delgado. ¿Hablamos? (CC BY-NC-SA)

Aquí puedes descargarte la plantilla en PDF.