Hablas protegidas: bable y aragonés
Hablas protegidas en España
Además de las lenguas que gozan de oficialidad, en nuestro país existen otras habladas por pequeñas comunidades y en peligro de extinción. Por ello, existen algunos mecanismos de protección que están recogidos por la Constitución Española y los Estatutos de Autonomía de sus respectivas regiones. Las vemos a continuación.
Asturleonés o bable
El asturleonés es la lengua romance que evolucionó del latín en la zona del Reino de Asturias -posteriormente convertido en Reino de León-. La expansión que tuvo este poderoso reino durante la Edad Media llevó la lengua hasta las tierras de la actual Extremadura, donde aún podemos encontrar rasgos de ella, tras recorrer Asturias y Castilla y León.
Sin embargo, desde el punto de vista legal, no tiene reconocida oficialidad en ninguna comunidad autónoma, tan solo se recoge como "habla protegida" en la Constitución Española. Actualmente se está discutiendo el interés de otorgarle carácter oficial en el Principado de Asturias con el fin de ampliar su uso y garantizar su protección. Curiosamente el único sitio donde goza de oficialidad en es Miranda de Duero, ciudad portuguesa en la que se esta lengua es llamada mirandès.
Aragonés
El aragonés es la lengua romance que evolucionó del latín en la zona del Reino de Aragón, uno de los reinos más poderoso de la Europa medieval. Después de unirse con el Reino de Castilla bajo el reinado de Carlos I en el siglo XVI, Aragón paulatinamente fue utilizando más la lengua castellana hasta abandonar, casi por completo, el aragonés. Actualmente se calcula que existen unos diez mil hablantes de esta lengua en la zona norte de Aragón.